Primer ascenso documentado al Tostado Negro (4746 m)

La cumbre del Tostado Negro es el punto culminante del extenso cordón que se levanta entre las quebradas de Pillanhuasi y de la Tambería. Identificado en la cartografía desde principios del siglo XX, en un principio se denominó a todo el cordón Cerros de Guanaco Yaco, para luego ir identificando a partir de la década de 1940 las distintas cumbres que se recortan en su filo: Toro (4445 m), Caranchos (4.225 m), Guanaco Yaco (4484 m), Tostado Norte (4537 m) y Tostado Negro (4746 m). Al ser el punto mas alto del cordón se convierte en una cumbre principal, independiente, con una prominencia de 356 metros y una dominancia del 7,5%.Probablemente fue relevado por las comisiones topográficas del Instituto Geográfico Militar que operaron en la zona y sin dudas fue hito de las caravanas de arrieros que atravesaron la cordillera por la quebrada de Pillanhuasi buscando la Laguna de las Tunas para continuar hacia Chile o buscar al sur la cuenca de la Laguna Brava y su derrotero al país trasandino.

Objetivo de expedición

El 2 de enero de 2019 se reunieron en Fiambalá Iván Nieva (Catamarca), Carlos Montero (Bs. As.), Máximo Cavallín (Santa Fe) y Guillaume Ceyrac (Francia) con el objetivo final de ascender el Incahuasi. Como objetivo de aclimatación buscaron el Tostado Negro.

Como antecedentes de este ascenso, se pueden citar la exploración en julio de 2018 de Mauricio Bianchi quien verificó la aproximación por Pillanhuasi, y el de octubre del mismo año protagonizado por Marcelo Scanu junto con los ya citados Nieva y Cavallín.

Relata este último: “Al día siguiente por la mañana partimos hacia el valle de Chaschuil, llegando al arroyo de los cangrejos (éstos se dejan ver bajo las piedras del arroyo). Cargamos agua en bidones y seguimos por la ruta unos dos kilómetros. Allí a mano izquierda se ve una huella bastante marcada, que hay que tomar y que nos lleva hacia el oeste. En ese punto se alcanza a ver la cumbre del Tostado Negro, cuyo cuerpo está oculto por cerros. Se lo ve lejos, sin embargo se nota su altura, superior respecto al resto de los cerros del valle.

El vehículo debe ir buscando la quebrada de Pillahuasi o, como la llaman algunos puesteros de la zona, “Pillahuá”. Se pasa frente al cerro de los Caranchos y finalmente se accede a una quebrada angosta donde corre un arroyo. En total son unos 17km de ripio, en estado aceptable. El vehículo queda a 3400 m”

Luego de dejar en vehículo en el sitio histórico de Pillahuasi unos 3,5 km antes del puesto de la familia Carrizo, continuaron por la quebrada hasta el el puesto, donde acamparon.

El día 4 de enero, partieron de las carpas a las 8:45 hs y con rumbo sur remontaron la quebrada que sube hacia al portezuelo del Tapado, ganando altura paulatinamente hasta la misma hasta la base del Tostado Negro a 4450 metros.

Continúa en primera persona el informe de expedición: “Fuimos siguiendo siempre los GPS, ya que aparecían cerros similares que engañaban y nos hacían creer que eran el buscado. Finalmente apareció el Tostado Negro, claramente más alto que el resto. Para subirlo hay que atravesar tres grandes lomadas, ya más empinadas. Guillaume el francés desistió por dolores abdominales. Con Iván llegamos al último tramo y pudimos notar una sucesión de apachetas a lo largo del lomo vecino al cerro, un lomo de bastante altura que forma un gran murallón que conecta con la cumbre del Tostado Negro. A lo largo de ese lomo contamos tres apachetas. Ya muy cerca de la cumbre del Tostado Negro, fue muy emocionante empezar a entrever la apacheta que la corona”.

A las 14:15 hs Carlos Montero, Iván Nieva y Máximo Cavallín, estaban en la cumbre, logrando así el primer ascenso deportivo del cerro. Nieva midió 14,4 km de recorrido desde el puesto Carrizo y con GPS obtuvieron una altitud de 4757 m.